lunes, 2 de septiembre de 2019

OBSERVAR EL JUEGO CON CURIOSIDAD

Cuando dejamos a los niños hacer, entonces sucede lo imprevisto. Cuando miramos desde la curiosidad y la fascinación, con un interés sincero por aquello que se trae entre manos, es cuando somos capaces de apreciarlo.

Hoy he retomado esta entrada, de las muchas que tengo sin publicar, me he releído y he apreciado que sigo opinando igual, pienso que los adultos debemos dejar hacer, dejar hablar, dejar descubrir, dejar equivocarse, dejar aburrirse, dejar pensar... a los niños. Pero... ¿solo a los niños? ¿Y si nos atrevemos a mirar con los ojos de la fascinación a los adultos que nos rodean, a nuestros familiares, a nuestros compañeros de trabajo, a los conocidos y a los desconocidos? ¿No creéis que todas las personas tienen muchas cualidades, mucho que ofrecer?

Ahora que se acerca el comienzo de curso, que nos reencontramos los equipos, que nos toca sentarnos y hablar, decidir, consensuar... ¿No sería mucho más rico para todas las partes si cuando alguien habla los demás le prestásemos una atención real, de las de poner todos los sentidos, y lo hiciésemos sin esperar nuestro turno para decir la nuestra, sino con el auténtico propósito de darle valor a aquello que tiene que decir, de entender y aprender acercándonos a un punto de vista puede que similar o pude que muy distante del nuestro? Ahí lo dejo, ¡yo me aplico el cuento seguro!

Y reescribiría la frase con la que empieza esta entrada:

"Cuando dejamos a las personas hacer, entonces sucede lo imprevisto. Cuando miramos a las personas desde la curiosidad y la fascinación, con un interés sincero por aquello que se trae entre manos, es cuando somos capaces de apreciarlo".


Observando el juego 

Hay momentos en los que me vuelvo invisible y observo el juego de Juno desde la curiosidad infinita. La veo elegir un espacio, unos materiales, disponerlos de cierta manera y entablar unos diálogos interesantísimos con los objetos.

A través del juego Juno me muestra la persona que es: con las decisiones que toma, los roles que asume, etc. 

¿Qué mira a través del pequeño círculo rosa de la pieza?

Las piezas que estaban siendo utilizadas para construir una especie de alojamiento para los animales acaba acaparando su atención. Elige la que tiene menos zona para mirar, pero es la redonda, puedo deducir que es la que más se asemeja a unas gafas, unos prismáticos, una lupa... Objetos que ella conoce.




El juego inicial nada tiene qué ver con la acción que ahora está llevando a cabo. Empezó construyendo algún tipo de habitáculo para los animales y ahora los animales ya no figuran en su nuevo juego, ni siquiera la pieza que inicialmente ha utilizado para construir ya tiene esa función.

Los materiales versátiles, los objetos que pueden ser utilizados de muchos modos distintos, son los que fomentan la iniciativa, la imaginación y la creatividad. Aquellos que son poco dados a acciones repetitivas y restrictivas, otorgarán el protagonismo a la acción del sujeto y no tanto a las características del objeto en sí.

Feliz vuelta al cole, septiembre siempre es un renacer, vamos a quererle un poco...

lunes, 12 de agosto de 2019

EL LAZO ROSA PARA QUE SE NOTE QUE ES NIÑA, ¿NO?

Esta entrada se podría llamar "la anécdota del día", porque así ha sido: eso que lees un mensaje de un seguidor a la imagen que alguien pública y ves la que se lía y acabas leyendo todos los comentarios para ver hasta qué punto somos objetivos, educados, exagerados...  



Una madre comparte una foto con su hija, y la niña lleva el típico lacito rosa pastel con una mini cola en medio de la cabeza. Bueno... el peinado no entra dentro de mis opciones, ni el lazo, pero no me resulta chocante porque llevo viendo este tipo de peinado y accesorio en niñas desde que tengo memoria. 

Ni se me ocurriría decirle como tiene que peinar a su hija, pero es una foto pública y alguien si quiere decirle algo: "el lazo rosa para que se note que es niña, ¿no?". Y, como es de esperar, un aluvión de críticas de las defensoras (todas mujeres) a ultranza de la madre de la criatura que con más o menos acierto defienden el rosa. Algunas la atacan de dar significado a los colores cuando éstos no lo tienen, sino que somos las mentes sucias que se lo damos; otras sentencian que claro que sí, que sepa que nació niña y niña será toda su vida pase lo que pase. En fin... opiniones.

Yo, que había pasado olímpicamente de la foto por no gustarme, a ella no se lo voy a decir, pero como todos, si me pongo a observar tengo una opinión, y es que no es solo el color, ni siquiera el lazo. Es la foto en sí. No creo que tratándose de un bebé, nadie después de observar el conjunto, dudase de si es niño o niña. Otra cosa es que se trata del típico lazo pequeñito rosa clarito de mercería que aún no lo he visto jamás en un niño, aunque ya se ven niños bien pequeños con coleta, el estilo es bien distinto.

Pasando de los comentarios, que me interesan porque reflejan la sociedad en la que vivimos y cómo cuando queremos defender algo somos capaces de tergiversar, malinterpretar o bieninterpretar sin mucho objetivismo, pero con mucha pasión, eso sí. Yo me he fijado en la respuesta que ha dado ella, diciendo que se lo ha puesto por la hermana, que es su color favorito y quiere que vayan iguales. Ay, suena tan a excusa... Por verdad que sea. 

Me da por pensar, que la hermana ya influyó en la compra del chisme, que la hermana (también niña) tiene uno igual, que el color favorito de la hermana, casualmente, aunque el rosa es un color como cualquier otro dicen y repiten (si, si, ¡para mí también!) sea el rosa... Por muy cierto que pueda ser, yo me he quedado en plan, pfffff... Con tantos colores que decimos que hay (los hay) ¿¿por qué tantas niñas dicen que su color favorito es el rosa?? ¡¿Por qué se sigue hablando de "color favorito"!? ¡Nos podemos hacer algunas preguntas, digo yo!

El lacito rosa clarito en raso o seda da la sensación que perpetua ese estereotipo de las niñas de rosa y los niños de azul, es un estereotipo conocido y reconocido, por qué entonces la mayoría de defensoras tratan de hacer como si lo estereotipado sea ver en el lazo el estereotipo. ¡Qué rebuscado! Es que lo es, otra cosa es que la madre diga, vaya si que en esta foto se da eso de que las niñas de rosa, aunque yo uso todos los colores sin distinción. Y queda la mar de bien. 

Creo que prácticamente todos y todas reproducimos muchos estereotipos de forma inconsciente, propios de nuestro bagage cultural y de vivir en una sociedad concreta, pero no por eso debemos carecer de pensamiento crítico, es más, de autocrítica, para decidir qué consideramos que va con nuestra manera de pensar y vivir y qué no. Y si alguien nos lo hace saber espero que algun día dejemos de ponernos a la defensiva como respuesta, porque así no se avanza en ningún sentido.

¿Os habéis planteado qué estereotipos lleváis a cuestas? Deja que piense...

lunes, 5 de agosto de 2019

CAMBIOS QUE HAN IDO SUCEDIENDO EN MI VIDA

Antes de seguir escribiendo entradas quería hacer balance de los cambios que he ido introduciendo en mi vida, algunos más de carácter personal, pero muchos de ellos van más allá de mí misma y afectan a nuestra vida familiar. A los que "viajamos" juntos y nos vamos enriqueciendo mutuamente.


Pienso que la mayoría se han dado porque ya existía una semilla, algo se iba gestando para que se llegaran a producir, es el fruto de estar en constante proceso de crecimiento, de desarrollo personal. Si buscas experiencias que te hagan crecer, si dejas que estas experiencias te remuevan, al final el cambio es inevitable. 



Cuando pienso en mi yo del pasado, de niña, de preadolescente, de adolescente, de juventud, de pos juventud... ¡Veo un sinfín de etapas! Y en cada una me siento una persona distinta, de hecho, creo que aún me queda muchísimo por aprender, por mutar y por crecer.



1. UNA VIDA MÁS CONSCIENTE

  • Aunque suene a tópico eso de quererte tal y como eres, si lo consigues es liberador. Hacer y ser como te pide el cuerpo, como te sientes bien.
  • Jamás pensé que podría ir por la vida sin maquillaje, me entenderás si has crecido pensando que tienes muchos defectos y que los tienes que ocultar. A demás de cargar con un gran peso innecesario, no te estás respetando a ti misma y tampoco serás capaz de respetar los defectos de los demás. A esto añádele bien peinada, vestida, etc. Todos ellos asuntos superficiales, que si los haces por obligación no te aportan nada, te suponen un esfuerzo y te quitan mucho tiempo. Así, cuando los haces por gusto, tienen un sentido para ti.
Soy una arrítmica desorientada que lleva toda la vida tratando de no parecerlo y por fin estoy aprendiendo a amar mis defectos.
2. ZERO WASTE

  • No sé qué grado de consumista era yo, pero hace tiempo que va en descenso, hasta llevarlo a cabo de un modo plenamente consciente. Intento no consumir lo que no necesito, o lo que no me hace muy feliz, y si puedo será en una relación comercial justa en la que no se explote a nadie y no se abuse de nadie ni de nada.
  • En relación con lo anterior, dejar de consumir de manera irresponsable para mí es intentar no generar residuos que la naturaleza no pueda asumir. Hace poco me di cuenta del cambio real que he experimentado cuando un día que olvidé llevar la botella de agua, y Juno tenía sed, en vez de buscar un súper busqué una fuente.
  • Se puede resumir en:
Comprar solo lo que necesitas: evitar tirar comida, por ejemplo
Compra de proximidad, a granel, sin envases, sin tóxicos


 

  • Es un compromiso ético y de respeto al entorno. Es renunciar muchas veces a la comodidad por un bienestar común.
-- Cambio de hàbitos

  • Para reducir los residuos que generamos sin volverte loca, pienso que le tiene que preceder un cambio de hábitos: en los alimentos que consumimos, en el modo de cocinarlos, en el tipo de ocio que disfrutamos... 
  • No podemos pretender la inmediatez y la abundancia, porque es lo que nos ha llevado a necesitar que prácticamente todos los productos estén envasados o elaborados, que se tiren toneladas de alimentos sobrantes de supermercados y restaurantes y que exista esta voracidad consumista, en definitiva.
  • Mi intención es tener un huerto así que he empezado a practicar sembrando algunas semillas, pero mientras trato de comprar fruta y verdura lo más de proximidad posible, el payés del pueblo, por ejemplo. Y consumir productos de temporada siempre. Es apasionante esperar que llegue la temporada de tu fruta favorita, así se lo transmito a Juno cuando me pide melón en enero.
  • Me di cuenta de que lo que más tiraba a la basura eran envases de leche y yogurt, así que he puesto remedio substituyendo la leche de tetrabrik por leches vegetales hechas en casa (ya que bebo mucha leche por capricho) y compré una yogurtera de segunda mano que me ha solucionado el otro problema. Ahora cuando quiero tener yogurts tengo que hacerlos, a veces se acaban y no hay, el proceso requiere su tiempo, pues me aguanto. Hago y espero. De vez en cuando me permito un Kefir del Pastoret que me sabe a gloria y el envase es de cartón. 


-- Otros cambios

  • Uso desodorante, gel, champú, friegaplatos, etc. sólidos y pasta de dientes, crema hidratante, limpiahogar, etc. hechos en casa con recetas que voy encontrando. A demás me libro de tóxicos buscando recetas ecológicas.



  • Maxibolsa: salgo de casa siempre con botella de inox para el agua, tappers con comida para picar, muselina y cubiertos. Y bolsas de tela si voy de compras. Pero esto es desde hace tiempo, no recuerdo la última vez que usé un bolso pequeño...

-- Ropa

  • Compro muy poca ropa, no me motivan para nada las modas, y la ropa que tengo me suele durar muchos años. Aún así, tengo muchísima más de la que necesito. Lo que compro es casi siempre de segunda mano, y lo que no, es porque no lo encuentro.
  • Con Juno he intentado usar solo ropa prestada por otras familias, las chaquetas y gorros los teje mi madre, y yo también le coso algunas prendas especiales.
Os he puesto un poco al día de algunos de los cambios que han supuesto una nueva forma de cotidianidad, de tomarme la vida y que me apetecía mucho compartir por aquí. Ya os seguiré contando.

domingo, 4 de agosto de 2019

RETOMO EL BLOG Y COMPARTOS DOS SÚPER-CORTOS

¡Estoy de vuelta!

Vuelvo a mi espacio de reflexión, de guardar historias y cosas que me interesan, mi álbum de recuerdos, bloc de notas... A mi blog. ¡Ay, cómo he echado de menos escribir en este formato!

Tengo la espinita de que a causa de este parón he dejado de guardar muchos de los tesoros que he ido encontrando en mi camino, libros, películas, formaciones, lugares… Por eso vuelvo a la carga, para seguir coleccionando momentos, inspiraciones, divagaciones y lo que me apetezca, vaya.

Para no estresarme demasiado, empiezo con una entrada ligerita pero para mí, muy potente. Cuando veo algo que me encanta no puedo dejar de recomendarlo, y hace nada vi dos cortos imprescindibles. Con ellos me reestreno, espero feedback amores:)

Se trata del programa Curtcircuit 33 (cortocircuito 33) de la cadena catalana (de la que soy súper fan) Canal33. Presentan dos cortos del cine francés que están este año a concurso en los premios César: "Kapitalistis" y "Vilaine fille".

KAPITALISTIS 

http://kinanmassarani.com/kapitalistis/
CAPITALISTEAS (KAPITALISTIS) - Francia-Bèlgica - 14' - Ficción
Dirección: Pablo Muñoz Gómez
Producción: Roue Libre Production, Origine Films
Intérpretes: Georges Siatidis, Nikolaos Sachas

Este corto, que usa el sentido del humor para hacer una crítica social sobre la precariedad laboral en Europa, me pareció muy fresco y muy amable al tratar el tema. No entra en el dramatismo que puede sugerir la delicada situación de los personajes, todo lo viste de un toque de humor e ironía, hasta llegar a declarar que Santa Claus es capitalista porque lleva juguetes a los niños ricos y jerséis a los pobres.

VILAINE FILLE


LA NIÑA MALA (VILAINE FILLE) - Francia-Turquia - 8' - Animación
Dirección, guión y animación: Ayce Kartal
Producción: Les Valseurs

Este corto de animación es simplemente brutal. Desde el principio el trazo rápido y rabioso me absorbió, miras aunque duele y acaba y dices wow! Genial.

Enlace a los vídeos:
https://www.ccma.cat/tv3/alacarta/curtcircuit/curtcircuit-33-28072019/video/5892346/

Espero que nos disfrutéis tanto como yo.

sábado, 12 de enero de 2019

PRISA Y SOBREESTIMULACIÓN: SLOW

Iba a titular esta entrada "festina lente", que significa "apresúrate despacio", que es nuestro "vísteme despacio, que tengo prisa". Porque en pleno auge de lo rápido, con tendencias tan poco saludables como el "fast-food", compras híper rápidas on-line, trabajos en el que se exige ser muy productivo e incluso aprovechamos al máximo los traslados de casa al trabajo para comer, estudiar, escuchar música, leer los correos, estar informado, realizar compras y más y más trabajo ¡buff¡ ¿Qué tiempo nos reservamos para desconectar, mirar el paisaje o pensar en nuestras cosas?

Y si a este ritmo acelerado y trepidante le añadimos un huracán de información y de estímulos acechantes: vaya cóctel explosivo.

Me he dado cuenta de que una de mis preocupaciones, desde hace ya bastante tiempo, es evitar la sobreestimulación que siento que se va extendiendo como una gota de aceite y poco a poco se afana por invadirlo todo; ya parece casi imposible perderse por la montaña o encontrar una calita desierta. 



Lo empecé a aplicar en la escuela, como algo necesario para preservar el bienestar de los niños y las niñas. Nada fácil, cuando la creencia generalizada es que los niños para pasarlo bien cuanta más música, más alta, más globos y más colores, mejor. Y no te atrevas a ponerlo en duda, porque te caerá el peso del manido "a ellos les gusta". A ellos les puede gustar cualquier cosa que sienten que espera de ellos un adulto al que quieren, a parte de cualquier cosa a la que se les acostumbra: no son esponjas solo para lo bueno.

Pronto empecé a cuidar los detalles casi imperceptibles y que para mí eran primordiales: la luz adecuada, la calidez, el orden (incluso en las estanterías altas que creemos que pasan desapercibidas), las tonalidades, el tono de voz, el tipo de música, el volúmen y la intencionalidad de su uso, los ruidos, los distractores, las interrupciones innecesarias, la prisa...


Y acabó por convertirse en una necesidad también mía: ¡quiero un poco de paz!

Si pudiera tener el control de cuando quiero escuchar música a todo volúmen  no tendría ningún problema con ello, hay momentos en que me gusta bien alta: en un concierto de rock, escuchando a mis grupos preferidos mientras limpio el polvo, en el coche cuando voy sola y me apetece cantar... Pero cuando entro en una tienda me molesta bastante, igual que cuando observo el juego de los niños en mi estancia que en la de al lado suene a toda leche el "PotiPoti de animales".

Con la infancia sucede algo que no me acabo de explicar: 
¿por qué existe la tendencia a hablarles con un volumen más elevado cuando debería ser al revés, porque son bastante más sensibles a los sonidos? Y, sobretodo, ¿por qué los adultos se toman tantas licencias a la hora de tocarles y achucharles sin permiso? 

Oigo a menudo el mantra "no les pasa nada por..." refiriéndose a las situaciones nada adecuadas a las que los adultos les acostumbramos a someter. Una fiesta de cumpleaños plagada de adultos, música alta, dulces y refrescos, colores estridentes, juguetes, etc. en la que no siempre se busca el bienestar del protagonista. Largas jornadas de compras, cenas en restaurantes, horas de coche, dejar que desconocidos para el niño le cojan, le besen... Y os juro que me siento muy sola defendiendo otro trato para la infancia cuando gran parte de la sociedad acepta los micromaltratos y saca uñas y dientes cuando alguien pone en duda que sea totalmente aceptable. 


Os lo dice alguien que trabaja con una ratio nada respetuosa (por desgracia) y que a nivel personal comete muchos errores, pero no dejo de cuestionarme todo lo referente a esta cultura de infancia en la que creo y que no es más que ir aprendiendo de los errores del pasado, sin renunciar a los aciertos, pero siempre de la mano de la ciencia y de la reflexión, del sentido crítico y de la formación, la información como base para pensar y repensar, el diálogo y el intercambio de ideas y experiencias como herramienta para la autocrítica y la mejora. Y siempre desde la humildad y la objetividad de saber que nos queda muchísimo por aprender.


Estos días releyendo a mi querida Penny Ritscher me he sentido comprendida como nunca, esta entrada solo es una excusa para que leáis o releáis esta maravilla:



Escola Slow
Pedagogia del quotidià
Temes d'infància 
educar de 0 a 6 anys


En castellano:
La escuela slow (temas de infancia). 
Editado por Octaedro.